Un golpe de retroceso contra los dominicanos

SANTO DOMINGO. Como toda fechoría que se escuda en le oscuridad de la noche, el golpe de Estado al Gobierno constitucional del Profesor Juan Bosch, hace hoy 49 años, ocurrió en la madrugada, aprovechando el sueño de esa gran mayoría de dominicanos que lo eligió para guiar los destinos del país.

El presidente Bosch fue hecho preso pasadas las 2 de la madrugada del 25 de septiembre del 1963 por un grupo de los militares que debían velar por su seguridad y la de todo el país. Esos mismos militares deciden conformar una Junta Militar Provisional que se encargaría de gobernar hasta la creación, al día siguiente, del gobierno de facto que la historia registra como el Triunvirato.

Esos hechos, que abarcan menos de 48 horas de la historia dominicana, pesan hoy como un gran retroceso en el proceso de democracia que vivió el país, a decir del historiador Bernardo Vega.

Plantea que lo ocurrido en ese momento, no sólo trajo como consecuencia la guerra revolucionaria del 1965, con la consecuente intervención norteamericana, sino también el período de los 12 años de Joaquín Balaguer, época que todavía muchos dominicanos recuerdan con dolor.

El historiador rememora cómo la sombra del comunismo, ligada a una "debilidad" del propio gobierno de Bosch, dieron pie para que la "derecha dominicana", pudiera salirse con la suya, al orquestar y ejecutar el golpe. "Las elecciones de Bosch como presidente ocurrieron dos meses después de la Guerra de los Misiles, que hizo que la guerra fría se trasladara al Caribe, y Juan Bosch y su Gobierno fueron víctima de ese hecho. El miedo al supuesto comunismo en el gobierno de Bosch fue lo que hizo que los militares y la derecha dominicana complotaran para tumbarlo", recuerda Vega.

El historiador apunta que ese miedo al comunismo fue infundado y en realidad cubría la frustración de los sectores de derecha, que sentía "un vacío" por la derrota del partido de la Unión Cívica en las elecciones frente a Bosch.

También refiere el hecho de que el hoy fenecido profesor Juan Bosch estuvo viviendo en el exilio hasta poco tiempo antes de las elecciones, lo que lo hacía casi un desconocido para muchos en el país, una debilidad que se notó en la conformación de su gabinete, personas a las que le atribuye poco conocimiento, entonces, del pueblo dominicano.

La Fundación Juan Bosch, que mañana realizan una jornada conmemorativa de lo que define "el golpe contra el pueblo", plantea que los hechos de aquella madrugada dañaron la salud de la patria. La organización define el golpe como un "acto deleznable que cercenó la naciente democracia que empezaba a iluminar muchos rostros con la luz de la esperanza".

Medidas
Luego del golpe, la Junta Militar decidió disolver las cámaras legislativas y suprimir la Constitución que en abril de ese mismo año había emanado el Gobierno de Bosch, que incluía, entre otras cosas, la protección y respeto a la dignidad humana, igualdad entre las personas, libertad de expresión, la obligatoriedad del Estado de proveer educación y el derecho a huelga y a la organización sindical. Las medidas del primer gobierno constitucional que tuvo el país luego de la dictadura de Trujillo, también incluían planes de alfabetización, construcciones de obras, pero con, la abolición de la Carta Magna, también quedaron sin efecto las medidas.

El 28 de septiembre, tres días después del golpe, Bosch y su familia salían exiliados hacia San Juan de Puerto Rico, mientras el país quedaba a cargo de los integrantes del Triunvirato: Emilio de los Santos, Enrique Tavares Espaillat y Ramón Tapia Espinal. (Fuente: Diario Libre)