Sigue el pánico en los niños de centros educativos de Villas Agrícolas que vuelven a funcionar

Una semana después de ocurrida la fatal explosión en la fábrica de plásticos Polyplas, en Villas Agrícolas, las autoridades educativas han reaperturado los centros educativos Manolo Tavárez Justo y escuela España que resultaron seriamente afectados, aunque algunos niños están afectados de pánicos, con síntomas incluso de orinarse en la cama.

“Muchos de los niños han presentado pánico, han tendido a orinarse en la cama y nosotros estamos trabajando en el proceso de adaptación y la parte psicoafectiva”, indicó Rafael Elías Tejeda, técnico del Ministerio de Salud, este miércoles.

Se recuerda que las vibraciones de la explosión, que ha dejado hasta el momento ocho muertos y más de un centenar de heridos, se extendió a sectores del Distrito Nacional y provincia de Santo Domingo, distantes de Villas Agrícolas.

Tal y como lo anunció el ministro de Educación, Andrés Navarro, las clases han reiniciado hoy, pero la unión de padres y amigos de estas instituciones manifestaron ayer su deseo de que la docencia se retomen en enero por el terror que presentan muchos de los estudiantes, incluido residentes de Villas Agrícolas.

“Tenemos una buena cantidad de estudiantes en el Politécnico Manolo Tavárez Justo, más de un noventa por ciento, aunque no comenzamos con clases, estamos trabajando la parte psicológica de los estudiantes”, expresó Elsa Arias, directora del centro.

Dijo que el Manolo Tavárez Justo tiene una matrícula de 410 estudiantes, de los cuales asistieron más de 300.

La maestra explicó que el evento del pasado día 5 es algo que tanto profesores como estudiantes tienen que superar y por eso se trabaja arduamente en la parte psicológica.

Sin embargo, en la escuela España el panorama era distinto, aquí, de una matrícula 1,050 estudiantes solo han asistido unos 125, según explica la directora de la del centro, Luisa De León.

Los padres de los niños manifestaron ayer que estaban muy preocupados porque muchos de sus vástagos siguen atemorizados, dijo De León.

A los centros afectados les fueron reparadas decenas de ventanas, luces, paredes, extractores de aire del área del comedor, además de algunos hierros que protegen la estructura.

Instituciones como la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), el Ministerio de Salud Pública, el Servicio Nacional de Salud, la Universidad Evangélica, el Centro de Operaciones de Emergencias (COE), siguen trabajando en conjunto para ayudar a los niños afectados psicológicamente, explicó De León.

Mientras que Luís Ozoria Lara, coordinador de apoyo psicosocial del Centro de Operaciones de Emergencias (COE), detalló que en general se ha trabajado con una 502 personas tanto de los centros educativos, como exempleados de la colapsada fábrica de plásticos Polyplas y residentes de Villas Agrícolas.

“Hemos realizado terapias grupales, manejo del estrés en los rescatistas, intervención psicológica”, sostuvo.  

(Fuente: diariolibre.com)