Sigue el éxodo voluntario de haitianos; mientras el mercado se realiza normal en Dajabón

Dajabón -. El número de familias haitianas que están regresando voluntariamente a su país, luego de vencer el plazo del Plan de Regularización de Extranjeros ilegales, aumentó hoy de manera significativa.

No obstante, funcionarios Migratorios de Haití han sido apostados en el portón fronterizo que separa a Juana Méndez de Dajabón e interrogan a los inmigrantes antes de permitirle su paso.

Los inmigrantes tienen que demostrar con datos y hechos que nacieron en territorio haitiano para permitirle su ingreso.

Hoy fueron vistos varios camiones, minibuses y otros vehículos cargando mudanzas de haitianos hasta su país.

Mercado normal

El mercado binacional que se celebra los lunes y viernes en Dajabón se desarrolla hoy con normalidad.

Los haitianos entraron a primeras horas de la mañana para intercambiar negocio con los dominicanos.

Comerciantes haitianos dijeron que una cosa no tiene que ver con la otra y que la feria común tiene que continuar celebrándose los días establecidos sin mayores tropiezos.

Este lunes las autoridades dominicanas impidieron nuevamente la entrada de haitianas que trabajan en casas de familia, oficinas, comercios y otros lugares, alegando para ellas tienen que contar con visa dominicana.

A su vez, las autoridades haitianas impidieron el ingreso a su territorio de dominicanos que realizan trabajos ocasionales en el vecino país, porque tampoco disponen de documentos.

Esto ha creado malestar en ambos lados de la frontera.

Se van a los montes

Mientras que en Santiago es cada vez más mínima la presencia de haitianos en las calles, debido a que la mayoría se han escondido en zonas montañosas, donde los inspectores de Migración no pueden llegar cuando se inicie el proceso de repatriación.

Pobladores de Juncalito, Jánico, Cagueye, San José de las Matas, El Rubio, Mata Grande y otras localidades de Santiago dijeron que en los últimos días han notado la llegada de numerosos haitianos, incluso con mudanzas.

“Ellos se esconden en los cafetales y nadie logra apresarlos”, dijo Rosa Adames del montañoso municipio de Juncalito.

(Fuente: listindiario.com)