Washington (EFE)-. El Senado de Estados Unidos aprobó ayer una iniciativa que busca revertir la abolición de la neutralidad en la red, el principio que protegía internet como un servicio público y que fue abolido por el Gobierno de Donald Trump.
Por un escaso margen de 52 votos a favor y 47 votos en contra, la Cámara alta consiguió salvar el primer obstáculo para acabar con la nueva norma de la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) mediante un mecanismo del Congreso para revertir decisiones de agencias federales (CRA).
El éxito de la iniciativa en el Senado fue posible debido a la escasa mayoría de la que gozan los republicanos sobre los demócratas, de 51 a 49, y a la ausencia por enfermedad del conservador John McCain, lo que les permitió aprobarla con solo sumar el apoyo de tres legisladores del otro partido.
La norma que protegía la neutralidad de la red fue aprobada por la FCC bajo el Gobierno de Barack Obama en 2015 y eliminada el pasado diciembre con Trump como presidente.
Esta regulación impedía que las empresas proveedoras de internet pudieran bloquear o ralentizar el tráfico en cualquier portal a su antojo, por motivos económicos, garantizando la red como un servicio público y respetando la igualdad de acceso a la misma.
Con la nueva norma, que entrará en efecto el 11 de junio, las compañías que ofrecen servicios de internet podrían dar prioridad a unas plataformas sobre otras, e incluso bloquearlas, independientemente de cuál sea el contenido en cuestión y afectar de esa forma a medios de comunicación o portales como Netflix.
Desde que se votara la supresión de la neutralidad de la red el pasado 14 de diciembre, la decisión ha levantado el rechazo de la oposición demócrata, de algunas voces republicanas y de compañías proveedoras de contenido, mientras que múltiples estados han desarrollado iniciativas para mantener ese principio.
Ahora, la iniciativa necesitará pasar por la Cámara baja, donde los republicanos tienen una cómoda mayoría, y por las manos del presidente para alcanzar el objetivo de revertir la norma, algo que parece poco probable.
Desde ambos partidos, numerosas voces han apostado por alcanzar un acuerdo entre las dos partes para desarrollar una legislación que ponga fin a las disputas bipartidistas y den estabilidad al sector.
Por un escaso margen de 52 votos a favor y 47 votos en contra, la Cámara alta consiguió salvar el primer obstáculo para acabar con la nueva norma de la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) mediante un mecanismo del Congreso para revertir decisiones de agencias federales (CRA).
El éxito de la iniciativa en el Senado fue posible debido a la escasa mayoría de la que gozan los republicanos sobre los demócratas, de 51 a 49, y a la ausencia por enfermedad del conservador John McCain, lo que les permitió aprobarla con solo sumar el apoyo de tres legisladores del otro partido.
La norma que protegía la neutralidad de la red fue aprobada por la FCC bajo el Gobierno de Barack Obama en 2015 y eliminada el pasado diciembre con Trump como presidente.
Esta regulación impedía que las empresas proveedoras de internet pudieran bloquear o ralentizar el tráfico en cualquier portal a su antojo, por motivos económicos, garantizando la red como un servicio público y respetando la igualdad de acceso a la misma.
Con la nueva norma, que entrará en efecto el 11 de junio, las compañías que ofrecen servicios de internet podrían dar prioridad a unas plataformas sobre otras, e incluso bloquearlas, independientemente de cuál sea el contenido en cuestión y afectar de esa forma a medios de comunicación o portales como Netflix.
Desde que se votara la supresión de la neutralidad de la red el pasado 14 de diciembre, la decisión ha levantado el rechazo de la oposición demócrata, de algunas voces republicanas y de compañías proveedoras de contenido, mientras que múltiples estados han desarrollado iniciativas para mantener ese principio.
Ahora, la iniciativa necesitará pasar por la Cámara baja, donde los republicanos tienen una cómoda mayoría, y por las manos del presidente para alcanzar el objetivo de revertir la norma, algo que parece poco probable.
Desde ambos partidos, numerosas voces han apostado por alcanzar un acuerdo entre las dos partes para desarrollar una legislación que ponga fin a las disputas bipartidistas y den estabilidad al sector.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario